domingo, 27 de octubre de 2013

CUESTIÓN DE COMODIDAD







Hola a todos. Resulta que todos los padres tenemos a nuestros hijos en un pedestal, y que cada cosa que hacen, cundo son pequeños, lo vemos desde otro prisma, que de no ser nuestros hijos entraríamos en ataques de cólera, ira e histeria colectiva. Si un hijo se levanta un día con ganas de colorear y pintar, y decide tomar como lienzo las paredes de la habitación, será que está desarrollando su lado artístico, y quien sabe, a lo mejor tu casa se acaba convirtiendo, en un futuro, en un santuario de peregrinación arqueológica, cuando estudien esa especie de homínido, que durante su existencia fue para atrás en la evolución. Y no digamos si en medio de tal caos pictórico, se intuye a los progenitores sobre lo que un día fué una pared de color blanco ártico, con el incluido sobrebabamiento del piso. O si el pequeño Toma la decisión de esparcir todos los alimentos que fueron elaborados para su alimentación y convertirlo en sistemas decorativos ecológicos del hogar dulce hogar. Que fuerte está, mira dónde llegó, y si le añadimos que el progenitor paterno, ha sido untado en papilla de maíz hasta los calcetines, pues el resultado se convierte, en una anécdota con un calado de chistes, bromas y risas que durarán hasta que el padre, en una edad avanzada, se lo recuente a sus nietos. Ya no digamos, si el niño decide, que le sobran las cosas que en su día, colocaste y dispusiste por el salón, después de un estudio completo de diseño lumínica de la zona para mayor esplendor de los artículos colocados. En este caso, es solo un niño inquieto, en edad de descubrir el mundo que le rodea y con una enorme capacidad de adaptación al medio o en su contrario, de adaptar el medio a él, con la consecuente razonamiento paterno de, la culpa es nuestra por dejar eso ahí. Vamos, que a cada cosa que hacen, una buena justificación le darán unos padres, dispuestos a ver lo mejor de sus hijos elevados a la máxima potencia. Pero resulta que el otro día, nuestro pequeño llevó sus actos a un punto nunca visto por estas tierras. Resulta que nuestro niño tiene completamente controlado el tema de los escapes sólidos-líquidos. Pero ahí estaba el niño, jugando en el salón, delante de su padre y madre y acompañado de su hermana, cuando, ni corto ni perezoso, procedió a una bajada de pantalón y la siguiente capa en forma de calzoncillo y orinó en medio del salón, con el consiguiente asombro y sorpresa de los ahí presentes. A la pregunta de por qué lo hizo, la respuesta fue clara y contundente.... estaba jugando y por no dejar de jugar, pero tampoco por hacérselo encima, pues ahí mismo, una cuestión de comodidad digo yo, lo que sé, es que sus padres, hubo un momento, en que no aguantaron la risa.... si fuese otro quien se lo hiciese en mi salón.... otro gallo cantaría. Esperando a la siguiente. Un abrazo.

9 comentarios:

  1. jajaaa jajaa qué cómodo¡
    Bueno, por lo menos el pantalón, se salvó de mojarlo...
    Qué salao¡
    Bss

    ResponderEliminar
  2. Entiende
    Donde esta el feo de mi hijo que no lo veo
    Somos unicos, pensamos que tenemos derecho a juzgar pero cuieado a mi no no digo mas. Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. jaja, espero que no se lo haya visto hacer a nadie, jeje...pensaba en un primito o amiguito...jeje)

    Feliz Domingo,

    http://quedateenminube.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  4. ...desde la psicología¿no estará llamando la atención de sus padres?
    Saludos

    ResponderEliminar
  5. BUENO....
    TE PERDONO QUE NO TE GUSTEN LOS GATOS.
    SEGURO QUE ALGO TE GUSTARA DE MIS COSAS.
    BIENVENIDA,
    SALUDITOS

    ResponderEliminar
  6. Bueno eso solo se le puede consentir a un hijo propio ,prque si eso mismo nos lo hace el hijo del vecino¿¿&%$??
    Bueno mis nietas hasta ahora solo me lo han hecho en la cama pero tengo protector de colchón y mis niñas "mean colonia" :-)
    Saludos

    ResponderEliminar
  7. Pues claro, pobrín, es que no le dio tiempo por lo entretenido que estaba. También a los mayores nos pasa ... "que me meo, que me meo ... " y ya te has meado pero no lo dices.

    ResponderEliminar
  8. Me ha echo mucha gracia su entrada amigo: creo que alos hijos y nietos se lo perdonamos todo.
    Gracias por su visita.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  9. ¡¡¡ JA...JA...JA...!!! No tardará mucho en que añorarás esas aventuras
    pero sus recuerdos los tendréis con alegría. Leerte, es siempre recordar cuando mis hijos eran pequeños y me devuelves a ese tiempo. GRACIAS AMIGO. Un abrazo

    ResponderEliminar